Esta es la segunda vez que Flor me confía un mueble heredado y tal como pasó la primera vez con esta mesita, fue cuestión de verlo, imaginar su posible transformación y enamorarse.


Si bien evaluamos otras opciones, a Flor le tiraba la madera y la verdad, este mueble estilo americano también nos pedía eso. Dudé un poco en tomar el trabajo porque si bien amo los muebles lavados, no es el trabajo que más disfruto hacer. Pero Flor es amiga de la casa, ex colega del mundillo Turismo/Hotelería y compañera de J y la verdad... no le podía decir que no ni a ella ni a este mueble, que no sé si parece en las fotos, pero es enorme!



No tenía un lustre muy oscuro, pero si bastante brillante. Estaba muy marcado en ciertos lados y la verdad, no lucía nada las bellas vetas que empezaron a aparecer mientras avanzaba con el lavado.
 La estructura y cajones eran enchapados así que tuve que ser bien cuidadosa.




Los tiradores originales sobresalían mucho, así que los reemplazamos por unos redondos, más planos y delicados, pero que van perfecto con la onda de la cómoda. No creen?! Algunas fotos #antesydespues




Si bien el resultado era el esperado por ambas, al menos yo estuve perdidamente enamorada mientras el mueble estuvo en casa. Es más, como se merecía unas fotos lo más lindas posibles, hice una movida mega en el comedor para que se pudiera lucir! Olivia y Uma no entendían nada con todo el revuelo de muebles y sillas desparramados :)



Unos pocos objetos, algunas texturas y transparencias y el infaltable toque de verde con algunas plantas y ese botellón que amo... y no se necesita mucho más, no creen?!




Gracias Flor! Una vez más un placer trabajar juntas. Una alegría me hayas confiado este mueble tan lindo. Que lo disfutes mucho en tu nuevo hogar.

Espero a ustedes también les guste.

Buena semana!