De nuestra reciente semanita en Patagonia me traje algunas ramas y troncos de esos bien lavados por el agua de los lagos. Pocos días después fueron parte de este terrario que hice el mismísimo día del Equinoccio de Otoño, bañada por el sol de esta estación que amo.


Siempre digo que amo los cambios de estación. Aunque debido al cambio climático que afecta a todo nuestro planeta Buenos Aires se vuelve por momentos más tropical, soy una agradecida de vivir en un lugar donde el paso de las estaciones se nota: más o menos grados, más o menos humedad, la cantidad de horas de luz, los colores... esas variaciones son maravillosas y al menos yo al final de cada estación siempre estoy deseando que llegue la próxima.


Este año, unos días antes del comienzo del Otoño anduvimos por Patagonia. Nos tocaron uno días divinos, pero ya se notaba más fresco y empezaban a aparecer los primeros amarillos, ocres y naranjas en álamos, lengas y demás árboles. Tuvimos como un adelanto de Otoño y yo feliz!
A los pocos días de nuestra vuelta a casa veo un post de las chicas de @ciabotanica con un terrario al que ellas llamaron "inmortal". Me encantó la idea y enseguida supe en qué iba a usar las ramitas traídas del sur. Pero no sólo iba  a usar ramitas patagónicas...



Recordé que del viaje a Grecia de Junio pasado nos trajimos una botellita de agua llena de arena gruesa de una de las bellas playas de la Isla de Milos. Y también una piedra de tonos rosados divinos!





Además se sumaron alguna otras ramitas secas que había en casa (muchas de las thujas de la Corona de Navidad que se secaron y tienen estos colores) y otras. Les debo los nombres porque soy malísima para los nombres botánicos.
Lo que sí les puedo decir es que pasé un lindo momento, que amé utilizar algunos recuerdos viajeros y sobre todo, que está buenísimo conectar con la naturaleza. Sobre todo si lo hacemos al ritmo de cada estación como hice yo con este primer sol tibio de Otoño




Si quieren hacer su terrario de Otoño, esto recomienda Compañía Botánica:
* Elegir ramas, piedras, musgos, frutos y lo que vayan encontrando en caminatas y salidas.
* La idea es que al elegir los elementos no dañemos la naturaleza, usemos lo que encontremos tirado o seco.
* Al ser elementos secos o de bajo mantenimiento este tipo de terrario no necesita mayores cuidados.
* Se pueden crear por estaciones o por lugares o paisajes que hayan visitado...

No sé qué dirán las chicas de mi mix greco-patagónico :) Yo creo que mi bosque es una linda manera de sumar Otoño y naturaleza en casa y con su alma viajera tiene el sello VP, no?!
Espero les guste!

Buena semana! Feliz Otoño!
y Feliz Primavera a las lectoras del hemisferio Norte!