Tuvimos la suerte de empezar nuestras vacaciones de Otoño en Patagonia de la mejor manera, en Eolo - Patagonia´s Spirit.


Eolo es una hotel de menos de 20 habitaciones, ubicado en el medio de la más bella estepa patagónica, a mitad de camino entre Calafate y la entrada al Parque Nacional Los Glaciares / Glaciar Perito Moreno.
Pertenece a la exclusiva cadena internacional Relais & Chateaux y los huéspedes que tienen la fortuna de alojarse en el hotel, tienen incluidas todas las comidas.
Presentado en esta especie de reducida ficha técnica... voy a intentar contarles y mostrarles por qué hay hoteles que como Eolo, son más que una linda habitación con amenities de calidad,  gratos espacios comunes y una excelente cocina... Eolo justamente acompaña y completa con creces una experiencia única en un lugar único como es Calafate con sus maravillosos glaciares.

Los primeros aplausos van para el lugar que eligieron para emplazar al hotel, inmerso en la inmensidad de la estepa patagónica. Tanto las habitaciones como las áreas comunes tienen amplios ventanales para disfrutar las increíbles vistas.



Más aplausos para el estilo arquitectónico... bien patagónico con el techo a dos aguas, chapa acanalada y detalles en madera. Divino!



Y cuando nos ubican en nuestra habitación, cero ostentosa pero con un excelente gusto y mis amenities preferidos... ya no hay aplausos sino cara de feliz cumpleaños :)


Cuando pudimos despegarnos de nuestra ventana... nos pegamos a estas otras ventanas en el living principal, con mapas, libros y telescopios muy pro... para por ejemplo, observar la luna llena que nos tocó esos días o las liebres que aparecen sobre todo al atardecer.


Yo estaba como loca con los muebles y detalles elegidos para cada ambiente, como estos tesoritos


No es increíble ese baúl? estaba asi, en un rincón... que vuelvan los aplausos!

Todo este entorno tan tan lindo se disfruta diez veces más con la discreta calidez del staff del hotel. Están en todo, pero uno ni se da cuenta... perfecto! 

Como buen hotel de la cadena Relais & Chateaux, la cocina tiene que ser buena, muy buena... Es difícil describir lo rico de cada plato que probamos en cada una de las comidas! Era pensar (y comentar con J!) "por favor que no termine, quiero retener este sabor en mi boca!" y venía el siguiente plato, y era sentir lo mismo, con todos los sentidos!



Para el té y la cena, la vajilla era antigua... pero siempre mezclada: ♥
De hecho, comentando con una de las chicas del staff, la regla es no combinar: genial!
Desde el desayuno, con carta de opciones de huevos hechos en el momento, hasta el box lunch/vianda que nos dieron para cuando fuimos a visitar el Glaciar Perito Moreno (que incluía por ejemplo ensalada de papas andinas con sandwich de salmón!!) hasta cada una de las comidas... todas fueron exquisitamente excelentes. Aplausos de pie para el chef Juan Pablo Bonaveri.


Por placer y trabajo, he dormido en hoteles de todo tipo, desde un hostel a hoteles 5*. Y más allá de cualquier categorización, estrellas y demás... creo que los hoteles que quedan en el corazón de los viajeros son aquellos que abrazan su entorno, aquellos que brindan una experiencia única para todos los sentidos. 
Ultimos aplausos de este post para Eolo y el lujo bien entendido, un lujo con espíritu patagónico que nos costó dejar atrás.



Gracias totales a Valentín y a todo el equipo por tan maravillosa estadía!! Todos los aplausos para ustedes :)
Si quieren seguir soñando y aplaudiendo... visiten la web de Eolo