Y llegó un día, demasiado pronto, en que tuvimos que despedirnos de "nuestra casita" en la Provence y continuar rumbo Sur-oeste hacia la Riviera Francesa. Hicimos base en un pueblito divino, pero no queríamos dejar de pasar por dos de las ciudades clásicas de la Costa Azul: Cannes y Niza. Las visitamos distintos días, ambos con nubes y algo de lluvia, pero no por eso ellas perdieron su encanto y glamour.


Mientras Laura, nuestra anfitriona en su bella maison provencale nos despedía podando sus rosales (sí, claro, sigo soñando con tener un ratito de su vida! ja) y dejábamos la bella Provence atrás, el cielo se iba poniendo cada vez más gris. Es raro, rarísimo en pleno Junio, pero puede pasar y nos pasó!
Llegamos a la salida hacia Cannes y empezó a lloviznar. Encima tráfico, mucho, como supongo es normal al entrar a una ciudad más grande que las que veníamos visitando.
Pero logramos atravesarla y aparcamos en el mismísimo Palais des Festivals, el que hemos visto cantidad de veces como sede del Festival de Cine más glamoroso del mundo.

Fue el Ministro de Justicia británica Lord Brougham quien lanzó a Cannes a la fama en 1934, cuando se detuvo aquí camino a Niza. En esa época no era más que un pueblo de pescadores, pero cautivado por el clima se construyó aquí una villa. Así comenzó una moda que continuaría...



Pisar Cannes tuvo cero glamour para nosotros, ya que se largó un chaparrón que nos obligó a almorzar temprano frente al Palais, mientras esperamos que pare un poco. Teníamos el auto con todo nuestro equipaje, pero salí con poco abrigo, sin paraguas... un desastre! Igual, nada nos iba a impedir conocer un poquito de Cannes.
Empezamos por el Oeste, con el Cannes antiguo. La Rue St-Antoine sube hasta Le Suquet, el pueblo original, que como suele pasar en estas ciudades, está algo elevado y mirando al puerto y la marina. A pesar de la lluvia, los colores pasteles de las casas y aberturas y la cantidad de Santa Ritas en flor, hizo placentera nuestra caminata






Las vistas desde la zona más alta son imperdibles, me las imagino con cielo azul y sin nubes bajas, con el Mediterráneo en todo su esplendor! Luego bajamos y paseamos por la marina/puerto con pintorescos barcos de pesca y yates de todo porte, rodeados por edificios como el Hotel de Ville y otros. Las vistas desde acá hacia Le Suquet creo fueron mi parte preferida de Cannes!




Hacia el Este se encuentra el famoso Boulevard Le Croisette, con sus célebres palmeras, tiendas de lujo y hoteles 5* como el Hotel Martínez o el Carlton Intercontinental, todos con vistas divinas hacia la bahía Napoule y los Montes Esterel. Se largó a llover mal, por lo que la recorrimos en auto, bajo la lluvia... y adieu Cannes! Ojalá te podamos conocer un poco más y con sol alguna otra vez!

Con Niza nos pasó algo similar... el día amaneció soleado, aprovechamos para visitar ciudades y pueblitos cercanos de los que ya les voy a contar, y a la tarde, llegando a Niza, otra vez cielo gris plomo amenazante. Tanto no nos importó, porque no era nuestra primera vez en esta bella ciudad. Hacía exactamente 10 años atrás habíamos pasado un par de días antes de seguir rumbo a Italia. Y aquella vez sí, Febo estuvo de nuestro lado y hasta nos bañamos en el mar! Algo bastante lejano a esta segunda visita... pero cuando estás de viaje no te importa nada, y el azul de la costa azul se verá menos azul en un día nublado, pero sigue siendo azul!



Niza es LA ciudad de la Riviera francesa y reúne todo tipo de encantos:  museos, mercados callejeros, bellas playas mediterráneas, un laberíntico casco antiguo y un sol radiante (casi) todo el año :)  En una caminata de menos de 10 km se puede recorrer el corazón de Niza, comenzando justamente en la Promenade des Anglais y terminando en el Puerto.
La zona que más me atrae siempre en este tipo ciudades es el casco antiguo. Y así como en Cannes nos encantó Le Suquet, aquí en Niza dedicamos la tarde a perdernos en la Viex Nice: densa red de callejones peatonales, estrechos edificios y fachadas italianizantes de colores pastel. Hay cantidad de iglesias, bares y restaurantes y la famosa Cours Saleya, con más barcitos,  un mercadito de flores y vegetales durante el día y mucha vida también durante la noche. Muy turística, pero a la vez, nizarda hasta la médula :)





Esta zona está muy cerquita de otro clásico de Niza, les Ponchettes. Sobre el Quai des Etats-Unis, les ponchettes son casitas de techo plano, una al lado de la otra. Nosotros nos seguimos adentrando en el Casco Antiguo y tomamos un cafecito reparador en la Place Rossetti. Había muchos europeos de todos lados, ya que estábamos en plena Eurocopa y Niza era sede, por lo que los bares con tele estaban repletos de fans!





Además de la Catedral de Santa Reparata, de estilo barroco, sobre esta plaza se encuentran los helados Fenocchio. La verdad, no los probé (era otra tarde fresca en pleno verano, estaba más para capuccino y crepe de Nutella! ja) pero estaba lleno, los recomiendan en todas las guías y por lo que vimos, no paraban de vender! Con helado o capuccino, regálense un rato para ver la vida pasar en esta plaza.

No fue nuestro caso, pero pueden continuar hacia el este y visitar la Colline de Chateau, un saliente rocoso sobre Viex Nice con panorámicas de todas la ciudad. Más allá, también se encuentra Port Lympia con cantidad de yates de lujo y las tiendas y bares modernos del Puerto.

Nosotros fuimos hacia el lado contrario, ya saliendo del Vieux Nice hacia el Boulevard Jean Jaurés, y descubrimos la novedad de la ciudad: La Promenade du Paillon, un paseo en el corazón de la ciudad que cubre una distancia de 1,2 km entre el Teatro Nacional de Niza y el mar. Bellas zonas verdes, áreas de juegos para niños, plaza de aguas danzantes y mucha onda... realmente muy lindo!






Definitivamente estas fotos nubladas no son las clásicas que podemos imaginar para esta zona... pero puede pasar, y viajando, uno siempre le pone onda al mal tiempo. A nosotros nos tocó hacerlo en Cannes y en Niza.


Espero hayan disfrutado de todos modos del paseo, paraguas en mano!



Más info:

CANNES
http://www.cannes-destination.com/

* Entre las zonas Le Suquet y La Croisette se encuentra les Allées de la Liberté. un espacio bajo la sombre de los plátanos que se anima sobre todo los fines de semana con mercados callejeros, partidas de pétanque (similar a las bochas), etc. En el centro de esta zona, se levanta una estatua de Lord Brougham, gran benefactor de la ciudad (segunda foto de este post).

* Dicen que la visita a las Islas Lerins en ferry es muy interesante y un verdadero contraste con la ciudad de Cannes. Son sólo 20 minutos los que se tardan en llegar a estas islas mini que no tienen nada de tráfico, sólo bosques aromáticos perfectos para pasear o hacer picnic, antes o después de visitar las varias ermitas que recuerdan que estas islas fueron importantes centros religiosos de Francia.

NIZA

* Aunque por la zona céntrica de la Promenade des Anglais les parezca que son todas playas privadas, hay playas públicas. Lo que sí, llevense al menos una toalla o varias, porque la playa es de piedras grandes, bastante incómodas! Pero el mar, ese que probamos aquella otra vez, les prometo que hace olvidar de las piedras! 

* Yo lo sigo teniendo pendiente, pero si pueden visiten el Musée Matisse. Vivió mucho tiempo en Cimiez (barrio al Noreste de Niza), y amó tanto esta ciudad y su luz que le legó todas sus obras. Además de su obra, el edificio es hermoso.

* Otro Museo en Niza: Musée March Chagall

Además, hay otros museos como el Masséna, el Musée des Beaux-Arts y el Musée d´Art Contemporain.

* Donde coman, seguramente coman bien! En plena Francia y tan cerquita de Italia, hay que tener mala suerte para que una pasta o pizza o lo que sea no sea increíble! El plato típico es la socca, tortas de garbanzo, o sea fainá. No soy fan, pero paso data :)

* Shopping: si les pasa como a nosotros que te llueve mal en Niza... un buen lugar para escaparse es un centro comercial de lujo pero con marcas accesibles como Uniqlo, MNG, Zara, Forever 21, Printemps, Primark y muchas otras. El lugar es tan top. que hay esculturas de Miró! Si, así como les digo! Nosotros pasamos de casualidad, y con la tormenta de esa tarde, fue un buen plan de camino a nuestro hotel en Saint Paul de Vence. Queda en Cagnes sur Mer, a unos minutos de Niza y también tiene restaurantes y cine.
http://polygone-riviera.fr/access


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* Si te perdiste los posts anteriores recorriendo la bella Provence, en la categoría Alma Viajera tenés todos!
* El día a día completo del viaje está en este post. Hasta ahora nos dedicamos a Francia.