En nuestra corta visita a Dublin, lo que más nos impactó fue sin dudas la Universidad Trinity College. El campus, en pleno centro de la ciudad es para perderse por horas y sacar fotos y admirar ese verde increíble de sus plazas y jardines. Paseamos?!
 

La universidad Trinity College de Dublín es la universidad más antigua y prestigiosa de Irlanda. Aunque en sus orígenes se construyó fuera de los límites de la antigua fortaleza, hoy está en pleno centro de la ciudad. 




Fundado en 1592 por la reina Isabel I y construido sobre un antiguo monasterio agustino, el campus ocupa una superficie de 190.000 metros cuadrados, conservando parte de su antiguo aislamiento y sus plazas adoquinadas, jardines y parques... que son espectaculares!






Al entrar al campus, enseguida se ve la torre del campanario, erigida en 1853 en el lugar donde se cree que estuvo el centro del antiguo monasterio. Cuenta la leyenda que los estudiantes que pasan debajo del Campanile cuando doblan las campanas no aprobarán sus exámenes :(



Un imprescindible que nosotros no hicimos es visitar la Biblioteca. Dicen que es de las más bellas del mundo. La sala principal, conocida como "Long Room" (Habitación Larga), tiene 65 metros de largo y contiene más de 200.000 de los libros más antiguos de la biblioteca. Las infinitas estanterías repletas de libros inundan el ambiente con su olor a madera antigua.
La joya de la biblioteca es "The Book of Kells" (El Libro de Kells) que contiene un texto en latín de los cuatro evangelios escritos con una caligrafía muy ornamentada, realizada con coloridos pigmentos. Se cree que el Libro de Kells fue creado por los monjes de Iona a principios del siglo IX. Tras el saqueo de Iona a manos de los vikingos, en el año 806 d.C., los monjes que sobrevivieron se trasladaron a Kells. Cientos de años después, por razones de seguridad, el libro fue enviado a Dublín y llegó a manos del Trinity College en 1661. Hoy, se encuentra situado en la Antigua Biblioteca acompañado de una exposición que explica a fondo su contenido.


Lamentablemente, un poco por desconocimiento y otro poco por falta de tiempo (abren solo 4 horas por la tarde los domingos de invierno, cuando estuvimos nosotros) nos lo perdimos... aunque siempre está bueno tener razones para volver a una ciudad :a la buena onda irish y el Temple Bar, sumamos The Book of Kells!





De todos modos, nadie nos quita ese largo rato caminando por cada uno de los edificios del campus, sus jardines, las canchas de rugby, tenis, sus puertas de madera, sus arboles otoñales y ese verde tan tan intenso como nunca vi.  Porque no vamos a negar que el clima es complicado en Irlanda... pero gracias a eso, tienen un verde único que enamora ♥



Gracias por viajar conmigo!
Feliz fin de semana, Feliz San Valentín y Feliz Carnaval!