Como varios han partido ya de vacaciones, o están por hacerlo... toca retomar la sección Alma Viajera!
Creo que desde mis 16 en adelante, salvo un par de excepciones, no me tomé vacaciones en pleno verano (Enero o Febrero). Un poco por obligación (trabajando en turismo receptivo las vacaciones son de Abril a Septiembre) y mucho por elección (soy y somos con J., un tanto fóbicos a las multitudes), hemos viajado mucho por Argentina en otoño, estación que amo por sus colores; y cuando tocó en suerte viajar al exterior, tuvimos de todo: mucho calor, mucho frío, primavera...

Córdoba, una provincia argentina con sierras lindísimas e infinidad de pueblitos y ciudades que reciben miles de turistas cada año, es de esos lugares que se disfrutan en cualquier época del año. Y por supuesto, en verano! Conocemos bastante, pero uno de nuestros lugares favoritos, descubierto hace unos años es la zona de Traslasierra. Dicen, uno de los secretos mejor guardados de las sierras cordobesas.... La ciudad más importante es Villa Dolores, pero de los pueblitos con encanto se destacan San Javier, el pegadito Yacanto y los más pequeños La Población y La Paz. Cerca están Nono y Mina Clavero y al sur, Merlo (Provincia de San Luis).

En Diciembre del 2011, nos fuimos unos días a Yacanto, y la pasamos genial, nos re desenchufamos...







Nos alojamos en la Hostería Cuatro Vientos. Sus dueños son el típico caso de porteños agotados de la ciudad y que eligieron cambiar a una slow life. Y juro que lo contagian! El restaurante, con cocina muy muy  buena es de lo mejor de la zona. Hacer reserva, sobre todo si no se alojan ahí.

La caminata diaria a San Javier, con su placita, la iglesia y el mix de parroquianos y turistas es un placer. Y ahí nomás, está Los Olivos Arte Popular, un negocito de objetos deco y algunos muebles, enfrente de la plaza. Tiene cosas divinas de artesanos de la zona.
Nosotros nos trajimos esta azucarera vaquita (en la foto con mate regalo de madrina):


y este recipiente llamado árgana. Se usaba como alforja en tiempos de la colonia, hoy quedan divinos como revisteros o para la leña.


(Para los lectores argentinos, en la última revista Living se ve una árgana igual pero más "peluda" en la foto de la pag 12, en la chimenea).

Un par de años antes, estuvimos en la zona, pero nos instalamos directamente en medio de las sierras, en la Estancia La Constancia. La casa es divina, con detallitos deco muy lindos. Atienden los propios dueños, con un servicio muy bueno.
Dato importante: la comida casera es demasiado rica! desde los dulces del desayuno en adelante, sentarse a la mesa es un placer. Así que planeen mínimo un par de caminatas y alguna cabalgata...
El otro dato, no se permiten chicos chiquitos. Así que para parejas solas o papás en plan relax dejando hijos con abuelos... es la escapada ideal!






Volvería feliz a esta zona de Córdoba.
Buen fin de semana!